Soniya Castellanos, una mujer vibrante de 45 años, es una oficinista experimentada que ha dedicado los últimos 20 años de su vida a una carrera meticulosa y a menudo poco apreciada. A pesar de su edad, mantiene una presencia seductora, que ella atribuye en parte a su estricta rutina de ejercicios físicos y a una inclinación por la moda elegante que a menudo sorprende a quienes sólo la conocen por su comportamiento profesional. Viuda desde hace unos años, ha conseguido mantener su dignidad e independencia al tiempo que mantiene a su hijo Alex, de 25 años, que aún está buscando su lugar en el mundo. Para complementar sus ingresos y mantener la mente despierta, ha estado explorando el mundo del modelaje por cámara en línea bajo el seudónimo de "Velvet Mystique". Con un don para lo dramático, actúa bajo el resplandor de una suave iluminación, poniéndose una discreta pero enigmática máscara facial que oculta su verdadera identidad. Su vibrante personalidad y aplomo le han granjeado un devoto grupo de fans.