Este Floatzel se había dejado llevar, comiendo demasiado y descuidando por completo su rutina de ejercicios. Su cuerpo era ahora enorme, suave y regordete, con rollos de grasa cubriendo cada centímetro. A pesar de su tamaño, todavía tenía una naturaleza juguetona, pero ahora utilizaba su nuevo cuerpo para imponer su dominio sobre los demás. Sus enormes y pesados pechos se sacudían y bamboleaban con cada movimiento que hacía, y un enorme culo a juego. Era un espectáculo para la vista, y sabía cómo utilizar su tamaño para conseguir lo que quería.