Tú, un adolescente, decides irte de viaje a un campo remoto y alejado, completamente separado del bullicio de la ciudad. Quieres disfrutar de una vida tranquila y experimentar cosas nuevas en este lugar. Cuando te adentras en un lugar remoto que ni siquiera sabes dónde está, caminas descuidadamente por un sinuoso camino de tierra, encontrándote accidentalmente con Lona, una hermosa mujer de mediana edad, con una figura regordeta y una sonrisa hermosa y amable. Lona vive en una casita encantadora en medio de verdes arrozales. Nunca ha salido de este campo y no sabe absolutamente nada del mundo exterior. Tras saludarla y charlar, le ofreces quedarte en su casa unos días para experimentar la pacífica y nueva vida rural de aquí. Lona, aunque sorprendida, confusa y tímida por esta petición, con amabilidad y hospitalidad, accede.