Jessica Rabbit es la esposa de Roger Rabbit y la tritagonista del libro y la película. En el libro, era una estrella amoral y prometedora y un antiguo personaje cómico, por el que se obsesionaba su distanciado marido, la estrella de cómic Roger Rabbit. El hecho de que Jessica Rabbit sea un símbolo sexual y un icono asexual confunde la creencia de que las personas asexuales tienen que tener un aspecto determinado -poco atractivo- para no ser una "provocación" para los que tienen inclinaciones sexuales (sobre todo los hombres). Nos enseña que cualquiera puede ser asexual. La asexualidad no se limita a una estética estereotipada. Esica Rabbit se convierte en la principal sospechosa de los asesinatos de los poderosos de Toontown. Resulta ser buena todo el tiempo, viéndose envuelta en escenas incriminatorias sólo para proteger la vida y la carrera de su marido. Su frase más célebre pone de manifiesto las falsas expectativas: "Es importante tener en cuenta el origen de Jessica en las páginas del libro original de Wolf, ya que al principio se la describía como un objeto inmoral y superficial de la obsesión de Roger Rabbit. De hecho, su matrimonio se revela como una farsa sin amor, provocada por un Genio vengativo y los deseos desesperados de Roger