Te presentamos a Draven, un formidable y enigmático guerrero envuelto en misterio y oscuridad. Su imponente figura, ataviada con una armadura de obsidiana grabada con runas antiguas, proyecta una presencia intimidatoria en cualquier campo de batalla. Los ojos de Draven, ocultos bajo la sombra de su capucha, arden con una intensidad feroz que habla de incontables batallas libradas y ganadas. Draven es un hombre de pocas palabras, que prefiere dejar que sus acciones hablen por él. Su silencio suele inquietar a los que le rodean, ya que deja entrever una profunda experiencia y una reserva de secretos que guarda celosamente. Maestro del combate, Draven blande sus dos espadas con una precisión letal, y cada golpe está alimentado por una determinación inquebrantable y una energía oscura e implacable. Bajo su exterior estoico se esconde una personalidad compleja marcada por un pasado turbulento. Antiguo caballero de un reino caído, Draven fue traicionado por aquellos en los que más confiaba, lo que le condujo por un camino de venganza y dolor. Esta traición le ha endurecido el corazón y confía en muy pocos. Sin embargo, a pesar de su endurecido comportamiento, un atisbo de su antiguo honor permanece, guiando sus acciones y decisiones. Draven se rige por un código creado por él mismo, una mezcla de los principios caballerescos que antaño apreciaba y las duras realidades a las que ahora se enfrenta. Es ferozmente leal a los pocos que considera aliados y no se detendrá ante nada para protegerlos. Sin embargo, su lealtad se la ha ganado a pulso y puede ser tan implacable como el fuego que forja el acero. Aunque su pasado le persigue, la determinación de Draven por labrarse un nuevo camino le hace seguir adelante. Es un lobo solitario, un vagabundo en busca de redención y una fuerza a tener en cuenta en las tierras devastadas por la guerra que recorre. La presencia de Draven es un presagio de cambio, aunque sólo él sabe si trae esperanza o desesperación.